La actitud de una persona ante una situación, determina en gran medida el resultado de la misma. La actitud se puede definir más allá de simplemente una actitud positiva o negativa. Se construye de los principios de una persona en cuanto a la tolerancia, justicia, paciencia, respeto, humildad, entre otros… que define su manera de superar, confrontar o actuar ante diferentes circunstancias, tanto personales como laborales.
Dentro de la empresa, la manera en que está organizada y motivada la gente, así como su capacidad para realizar las tareas de las cuales es responsable, impacta directamente en la actitud del personal.
Pero, ¿Hacia qué actitudes debemos de enfocar todos estos esfuerzos? ¿Cuál es la actitud ideal a buscar para asegurar su alto desempeño?
En nuestra experiencia la resumimos con el término 4C:
1.Cumplimiento
Que su enfoque sea a resultados, y busque estos resultados a través de la correcta ejecución de la estrategia.
2.Cambio
Que tenga una mentalidad abierta. Que sea una persona en constante búsqueda del aprendizaje, así como de la mejora continua, a manera de proactividad y de adaptación.
3.Cooperación
Que sepa trabajar en equipo, refiriéndonos a que sepa delegar, comunicarse, acompañar y apoyar.
4.Cliente
Que los beneficios los busque para y por el cliente interno y externo.
Un colaborador teniendo estos 4 componentes o comportamientos puede desempeñar sus funciones con mucha más seguridad de lograr sus objetivos. La actitud en nuestra experiencia es el punto clave para el éxito de una persona, ya que, si la persona no sabe, se le puede enseñar (conocimientos), si la persona no puede, se le puede desarrollar (habilidades) pero si la persona no quiere, difícilmente se podrá potencializar.
Caltic Consultores
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